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Hoy, día de Todos los Santos, me cuentan que Teresica Saussol Palazón murió a principios de este último mes; el día 7 de octubre de 2.024. D.E.P.
Cuando llegas del otro lado del charco en barco, localizar la ciudad donde nació nuestra amiga Carmen Sosa Galardi, es pelín dificultoso, o no si sigues navegando, de este a oeste, por el río más ancho del mundo, el Río de La Plata.
Llegó a Murcia «no ha mucho tiempo», hace ahora 20 años. Venía muy, pero que muy «ligera de equipaje».
El equipaje consistía en su hijita querida, de ojos azules, distintos a los verdes de su madre, «y más dulce que una garza», que diría el profe de filosofía, si bien más poeta Fulgencio Martínez, otro del Sur, donde los parroquianos, Teresa et al., conocimos a Carmen. Por entonces subsistía vendiendo unos curiosos pendientes que mostraba engarzados en un paño negro. Las clases de teatro que impartía eran insuficientes para sostener a ella y a su hija.
Se trajo de Uruguay su talento y su fina estampa.
En Murcia recibió reconocimiento como actriz, como profesora de Primaria y de Teatro. También adquirió su distinguido pelo blanco. Y no ha perdido su peculiar y suave acento «uruguachyo».
Teresa, más fiera que muchas; a ella y a mí, nos «hacía falta poco anís pá regoldar.» (frase célebre de Paco Vivas Palazón.
Ya muy avanzada la noche, como casi siempre, en El Sur, a Teresa se le ocurrió que lleváramos a Carmen a su casa en Vistabella. Mi antiguo BMV poseía un potente y excelente equipo de sonido. Dejamos a Carmen y, a la orden de «espérate a que esté en casa», permanecí aparcado en el amplio patio de vecinos.
-Creo que ya ha llegado… pon a La Callas a toda pastilla-
-hombre mujer… a estas horas… no lo veo yo…-
-pon a toaleche Un Bel di Vedremo. ¡Y no des por culi!.-
–El por culi se lo vamos a dar a los vecinos que mañana trabajan-
-seguro que más de uno está encantado de oír «Madame Butterfly», en versión de María Callas, incluso a estas horas.-
Creo que alguna raya continua debí de pisar con el coche, vi normal que los vecinos disfrutaran de mi equipo de sonido. Así que abrimos la puerta del portaequipajes, para mayor disfrute de los numerosos residentes de Vistabella.
Teresica: «me quedaré con las ganas de verte«‘. (Estopa)